¿Se puede tener un equilibrio y aun así disfrutar? Siempre se ha hablado de que hay que tener un buen trabajo para
poder disfrutar de una buena vida. Michel Edery nos habla sobre la importancia de diferenciar el
significado de la palabra trabajo, pues se pueden tener en cuenta dos
definiciones.
Existen diferentes apreciaciones de la palabra trabajo, sin embargo,
se consideraran dos significados en particular, entendiendo que la
definición única y etimológica de la palabra se refiere a la acción de
realizar una actividad en particular, considerando dos aspectos, uno el
trabajo intelectual del cual se requiere de mucha concentración y el
trabajo del hogar o una investigación escolar; de las cuales se reciben
reconocimientos verbales, felicitaciones y hasta una remuneración
económica, según el caso.
También es reconocido el trabajo laboral, bien remunerado, en el cual
además de realizar actividades específicas según el cargo a
desempeñar en una empresa, se recibe un reconocimiento verbal por
un buen desempeño, un pago mensual que te permite materializar
actividades extras en tu vida diaria.
En el desarrollo cultural y social establecido, se habla de que un buen
trabajo te puede brindar una buena vida, sin embargo, para encontrar
un equilibrio entre el trabajo y la vida diaria, deviene como parte de
un desafío al cual hay que enfrentarse debido a que la familia puede
resultar afectada.
Por eso es importante identificar y establecer parámetros, no tan
rígidos, pero si importantes para llevar un estilo de vida adecuado a
tus necesidades y así poder brindarte a ti y a los tuyos, una calidad de
vida merecida.
Desarrollar la capacidad de combinar con éxito el trabajo, los
compromisos familiares y la vida personal, es de vital importancia para
mantener el bienestar personal y familiar.
En una oportunidad participando en una reunión, justamente se
hablaba de la familia, del estilo de vida coherente y del equilibrio que
es importante desarrollar para procurar ese bienestar, el ejemplo
gráfico se dio cuando alguien dijo que la vida de los seres humanos
es como una arepa que se debía dividir en 4 partes iguales, cada
cuarto representa un área de la vida: la familia, el trabajo, el
entretenimiento y el amor propio.
Claramente se puede entender lo razonable de ese ejemplo y la
explicación que se dio en esa conversación, básicamente hablaba del
equilibrio coherente para lograr esa sensación de bienestar personal,
que de manera energética logrará contagiar a todo el que esté cerca
de uno.
Entre los ejercicios que se pueden aplicar para conseguir un balance
entre las actividades laborales y recreativas, dedicando el tiempo
adecuado a cada cosa, se plantean 5 tips para equilibrar la vida y el
trabajo, aspiración de la mayoría, que a largo plazo desarrolla
personas más productivas que obtienen mejores resultados.
Hacer pequeños cambios en la rutina diaria permite disminuir los
efectos negativos de un trabajo demandante y evitar que la vida pase
sin ser disfrutada.
1.- Mantente en forma: la disciplina es uno de los factores claves
para tener una vida satisfactoria, se aplica a todos los ámbitos, ser
organizado y aprovechar el tiempo al máximo, te permite tener un
enfoque de todo lo que se puede lograr.
La disciplina también te permite llevar a cabo un estilo de vida
saludable, el cual incluye una rutina de ejercicios, mínimo de 3 veces
por semana, combinando con una buena alimentación, te ayudará a
reducir los niveles de estrés, te brinda mayor seguridad personal y
eleva tu energía, lo que te permitirá mantenerte activo el resto del día.
2.- Enfrenta y resuelve tus problemas personales: invierte
tiempo de calidad con tu familia y tú pareja; conversa con tu pareja,
juega y atiende las necesidades de tus hijos, visita a tus padres, lima
asperezas con tus seres queridos y amigos. Estar en paz a nivel
emocional te permite afrontar mejor los retos que se plantean con un
ritmo de vida agitado.
3.- Disfruta la hora de la comida: el tiempo que le dedicas a la
comida también forma parte de esa actividad laboral que tienes con
tu jefe mayor, tú. La comida no es solo el momento para proporcionar
alimentos y energía a tu cuerpo, también es un tiempo de descanso y
desconexión y así recuperar la concentración. Evita saltarte la hora de
la comida, aprovecha de ese tiempo para estirarte, caminar en aire
fresco, conversar con tus compañeros o hacer cualquier otra cosa que
te relaje, eso te traerá como beneficios mayor productividad,
concentración y bienestar.
4.- Disfruta de tus vacaciones: es importante que tengas tiempo
para disfrutar de hacer otras cosas diferentes a la rutina de trabajo,
compartir con la familia y desconectarse de las labores, de las cargas
de trabajo, para reorganizarte y recargar energías. Evita resolver
asuntos laborales en tus días de descanso, respeta tu tiempo y disfrutade relajarte haciendo lo que más te guste, ir de paseo, de pesca o
simplemente leer un buen libro en la comodidad de tu mueble.
5.- Enfócate en ofrecer resultados, no tiempo: establecer los
objetivos de tu puesto y enfocarte en realizar un trabajo eficiente, sin
duda te permitirá ser más organizado y cumplir con tus metas y así
evitar horas extras de trabajo. Salir a tiempo, llegar a casa, descansar
y luego terminar algún pendiente puede resultar más productivo que
quedarse horas extras en la oficina.
Y como un adicional pero no menos importante, procura desconectarte
del celular y descansar de verdad; la tecnología está catalogada como
un arma de doble filo con respecto a la productividad, te permite estar
activo sin perder el hilo de tus actividades, sin embargo, en muchos
casos, se etiqueta como factor esclavizante, el control de la tecnología
lo tienes tú, no es lo contrario.
Has el ejercicio al menos una vez a la semana, no atiendas llamadas
ni correos de trabajo, ¡sé el primero en respetar tú tiempo libre!
Buscar el equilibrio entre las actividades profesionales con tu vida
personal, requiere de enfoque, determinación y constancia, los
resultados los verás reflejados en tu bienestar, marca la intención clara
y ponte en acción para que puedas disfrutar de los resultados.
Trabajo y vida por: Menahem Michel Edery